La playa se ha vuelto una adicción para mí, me encanta el agua del mar, sentir como rompen las olas en la orilla, ver ocultarse el sol, sentir la brisa marina de las tardes, caminar con los pies descalzos sobre la arena, me encanta todo eso.
Desde q iniciamos el negocio con Sole no hemos tenido mucho tiempo para estar juntas y a pesar q en mis vacaciones me fui una semana entera a la playa, este fin de semana también fuimos para allá, esta vez Sole y yo, nadie más, necesitabamos un rato para las dos.
En mi recorrido playístico (se dirá así jeje), he conocido varias playas del sur, como dije en post anteriores, al Silencio (es una playa del sur de lima), no iba más y no fui, cumplí!, con quién?, conmigo misma pues. Esta vez fue Pulpos, tiene unas casas hermosas, al menos las que están frente al mar, pero con esto de los Tsunamis, me daría mucho miedo tenerla tan cerca al mar.
Con Sole andamos filosonseando en donde nos compraremos una casa para descansar, antes era San Bartolo, después se me antojó Punta Hermosa, también son lindas las casas, ahora se me antojó, Pulpos.
Lo único malo, es q se está acabando el verano, el sábado por allá hizo un poco de frío, mis viajecitos a la playa, creo q ya terminaron :(
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